Historia clínica
Oto es un perro mestizo entero de 5 años, correctamente vacunado y desparasitado, que acudió a la Clínica Kivet Zaragoza Actur tras detectarse unos nódulos en el lateral y parte inferior de la lengua.
El tutor no había notado cambios en su estado general ni en su comportamiento. El paciente fue diagnosticado de Leishmania infantum hace 2 años y medio. Desde entonces se mantenía asintomático bajo tratamiento con Domperidona, con el último control analítico realizado hace 11 meses, cuyos resultados estaban dentro de la normalidad.
Síntomas detectados
Orales
Exploración y hallazgos
Durante la exploración física se observaron los siguientes hallazgos:
- Lesiones nodulares multifocales, parcialmente ulceradas, localizadas en la superficie lateral y ventral de la lengua.
- Afectación tanto de los bordes como del cuerpo lingual.
- No se evidenciaron lesiones cutáneas o mucosas en otras zonas del cuerpo.
- Estado general del paciente: Bueno, sin signos sistémicos asociados.

Pruebas realizadas
| Prueba | Resultado | Observaciones |
|---|---|---|
| Control sanguíneo de Leishmania | Titulación 1 (0,9 < Rz < 1,1 → 1/40 a 1/80, dudoso) | Compatible con infección activa subclínica |
| Análisis veterinarios | Dentro de la normalidad | Sin alteraciones sistémicas |
| Biopsia nódulos orales | Glositis granulomatosa y linfoplasmocitaria intensa, crónica con amastigotes intralesionales | Confirmación histopatológica de leishmaniosis oral |
Diagnóstico
Este tipo de lesiones orales son manifestaciones poco comunes de la leishmaniosis canina. Aunque las analíticas generales no mostraban alteraciones, la presencia de amastigotes en el tejido confirma la reactivación de la enfermedad y la necesidad de tratamiento.
Tratamiento aplicado
El protocolo terapéutico instaurado incluyó:
- Antimoniales (Glucantime®): 80 mg/kg cada 24 h durante 30 días.
- Alopurinol: 10 mg/kg cada 12 h.
- Posterior tratamiento inmunomodulador con nucleótidos (Impromune®, el cual es un coadyuvante inmunomodulador y no un antiparasitario directo).
- Suspensión progresiva de la Domperidona, ya que no fue suficiente para evitar la reactivación en este caso.

Evolución del caso
Tras un mes de tratamiento, se observó una remisión casi completa de las lesiones linguales. A día de hoy, 2 años más tarde, Oto ha permanecido asintomático y con controles serológicos estables, sin recurrencias ni aparición de nuevos signos clínicos.
Es importante recordar que los títulos serológicos estables durante 2 años son compatibles con infección controlada y no necesariamente implican ausencia de parásito.
Caso atendido por el equipo veterinario de Clínica Kivet Zaragoza Actur

Aprendizaje clínico
Este caso pone de manifiesto la importancia de considerar la leishmaniosis como causa de lesiones orales nodulares, incluso en pacientes aparentemente controlados.
Lecciones aprendidas:
- La glositis granulomatosa puede ser una manifestación atípica de Leishmania infantum.
- Las lesiones localizadas no descartan enfermedad activa.
- El tratamiento con antimoniales y alopurinol sigue siendo eficaz para controlar reactivaciones clínicas.
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